True West
Una transformación en pausa
El mito del sueño americano ha
cambiado desde la libertad individual de los pioneros donde primaba la igualdad,
hasta la justicia social del New Deal
que superó la Gran Depresión de los años 30, para terminar en una deriva aspiracional
centrada en el consumo de bienes materiales. Shepard concentró todas estas
tensiones en el interior de una casa cuando un vaquero crepuscular llegó a la
Casa Blanca en los años ochenta, para salvarnos de la decadencia provocada por
el bienestar social y así, True West convirtió
la disputa entre dos hermanos en un debate colectivo entre el sueño mítico y la
tozuda realidad. Un tema tan de ahora mismo como la consigna del nuevo sueño
americano. Levantar muros y azuzar odios para regresar a la prosperidad de
antaño.
El texto apela al espectador
contemporáneo mediante una conflictiva relación entre hermanos. Una palmaria realidad
que nos golpea hasta que se disuelve en un circunloquio absurdo por el que
transitan las discusiones familiares más bizarras, desde los asuntos serios hasta
las minucias de la vida.
Este objetivo se aprecia con
nitidez en las tres primeras escenas en las que Fran Martínez y David Diestre debaten
como contrincantes al canto de los grillos, conversan como hermanos con la luz
del día, y camelan cada uno con su estilo a un eficaz Andrés Pacheco como generador
del conflicto definitivo.
La metamorfosis a la que se
someten los personajes altera su composición por un freno de mano invisible, que
afecta a los dos hermanos cuando se quedan solos en escena. Se hablan pero no
se escuchan, se miran pero no se ven, se tocan pero no se sienten. La
transformación de ambos se produce en burbujas aisladas que alejan la emoción
del patio de butacas. El trabajo actoral es indudable y los desajustes desaparecerán
con el rodaje de la función.
‘True West’
Calificación: 3 estrellas
Producción: El Enjambre Lab. Autor: Sam Shepard. Dirección:
María Aladrén. Elenco: David Diestre, Fran Martínez, Andrés Pacheco Agudelo y
Nines Cárceles. Dirección Técnica, escenografía y sonido: Louis Wells. Luces:
Pedro Javier Mora. Vestuario: Nines Cárceles.
Viernes 25 de abril. Teatro del Mercado.
'True west': una transformación en pausa
Etiquetas: Andrés Pacheco Agudelo, Critica Teatro Heraldo, David Diestre, El Enjambre Lab, Fran Martínez, Louis Wells, María Aladrén, Nines Cárceles, Sam Shepard, Teatro del Mercado