Vetsusta Morla en la Oasis de Zaragoza
Aviso para incrédulos: Ya os lo dije: Vetusta Morla van a romper.No me pregunten la fecha pero hace unos meses la FNAC de Zaragoza homenajeó a Sergio Algora en su faceta musical, en los prolegómenos me encontré a Ana Manzana Muñoz , allí, tejiendo frases para disimular al palurdo que paseo en este body, hablé con la poeta de los días en los que El Niño Gusano apostó por las letras en español de calidad luxury, entonces, y a modo de ejemplo actual cité a Vetusta Morla, los ojos de Ana me miraron como nunca olvidaré, y ya era la segunda vez que eso ocurría. Unas semanas más tarde la poeta-estudiante-amadecasa me envió un mensaje: Vetusta Morla el 27 de noviembre en Zaragoza.
Crónica de antes de irme dormir: Tenía unas ganas mayúsculas de verlos en concierto. Había deglutido cada uno de los segundos de sus grabaciones, un grupo con más de diez años de local, un bagaje que pesa lo suyo, que se deja ver sobre el escenario, en la trama de unas canciones que han sido manufacturadas con la laboriosidad del artesano, que guardan detalles de buen gusto, de sabores, de vibraciones épicas, de momentos intensamente poéticos en las letras y rotundos en las melodías.
El sonido fue sobresaliente, pátina de lujo para unos tipos que han tenido la paciencia de grabar un disco por el puro placer de hacerlo, temas nacidos para ensalzar los sentimientos, que dosifican la cantidad necesaria de pasión, tempo inteligente, ir creciendo en intensidad hasta provocar las más efusivas muestras de entrega, unas canciones perfectamente ensambladas, el tejemaneje de los privilegiados, temas que nacen afectuosos, tristes o alegres, eso da igual, porque Vetusta Morla moldea el formato con sabiduría para, después de colocar el mensaje, regalarte un instrumental de esos que te dejan tirado por lo suelos, solfeo a la deriva que reposa lo dicho, que fluye, que se impregna en la piel, en lo heroico. Una mecánica que usan en todas y cada una de sus canciones y que en la noche de hoy han trasladado hasta el escenario. Un concierto perfectamente medido para que conmoción tocase cumbre a los sesenta minutos, cinco de descanso y vuelta al escenario para arrasar con la frescura del que ya ha triunfado.
Concierto memorable en la Oasis el de hace un par de pares de hora, una robusta demostración de cómo es posible perfilar, teñir y marcar temas míticos con versiones extendended life de altos vuelos, dosificadas con inteligencia y una elección perfecta de los temas para ir dando calor al público, el calentamiento previo a la entrega, una mirada efectiva para que los flujos emocionales se dejen ir, retornen, asciendan y de allí hasta la gloria.
Vetusta Morla es un grupo que, a poco que la suerte lo acompañe, se convertirá, si ya no lo es, en una formación de referencia, música para escuchar con los vasos sanguíneos, las venas y otros lugares líquidos donde disfrutar de un grupo inteligente. Los que han probado de sus recetas ya saben de lo que hablo, quien no haya degustado este exquisito manjar, no pierdan el tiempo, Vetusta Morla va a ser el próximo grupo revelado a las masas, la sensación de los festivales del verano que vendrá, y si no al tiempo.
Crónica de antes de irme dormir: Tenía unas ganas mayúsculas de verlos en concierto. Había deglutido cada uno de los segundos de sus grabaciones, un grupo con más de diez años de local, un bagaje que pesa lo suyo, que se deja ver sobre el escenario, en la trama de unas canciones que han sido manufacturadas con la laboriosidad del artesano, que guardan detalles de buen gusto, de sabores, de vibraciones épicas, de momentos intensamente poéticos en las letras y rotundos en las melodías.
El sonido fue sobresaliente, pátina de lujo para unos tipos que han tenido la paciencia de grabar un disco por el puro placer de hacerlo, temas nacidos para ensalzar los sentimientos, que dosifican la cantidad necesaria de pasión, tempo inteligente, ir creciendo en intensidad hasta provocar las más efusivas muestras de entrega, unas canciones perfectamente ensambladas, el tejemaneje de los privilegiados, temas que nacen afectuosos, tristes o alegres, eso da igual, porque Vetusta Morla moldea el formato con sabiduría para, después de colocar el mensaje, regalarte un instrumental de esos que te dejan tirado por lo suelos, solfeo a la deriva que reposa lo dicho, que fluye, que se impregna en la piel, en lo heroico. Una mecánica que usan en todas y cada una de sus canciones y que en la noche de hoy han trasladado hasta el escenario. Un concierto perfectamente medido para que conmoción tocase cumbre a los sesenta minutos, cinco de descanso y vuelta al escenario para arrasar con la frescura del que ya ha triunfado.
Concierto memorable en la Oasis el de hace un par de pares de hora, una robusta demostración de cómo es posible perfilar, teñir y marcar temas míticos con versiones extendended life de altos vuelos, dosificadas con inteligencia y una elección perfecta de los temas para ir dando calor al público, el calentamiento previo a la entrega, una mirada efectiva para que los flujos emocionales se dejen ir, retornen, asciendan y de allí hasta la gloria.
Vetusta Morla es un grupo que, a poco que la suerte lo acompañe, se convertirá, si ya no lo es, en una formación de referencia, música para escuchar con los vasos sanguíneos, las venas y otros lugares líquidos donde disfrutar de un grupo inteligente. Los que han probado de sus recetas ya saben de lo que hablo, quien no haya degustado este exquisito manjar, no pierdan el tiempo, Vetusta Morla va a ser el próximo grupo revelado a las masas, la sensación de los festivales del verano que vendrá, y si no al tiempo.
Etiquetas: conciertos
17 Comments:
Javi: está en la calle el libro de poemas del VII Festival Moncayo de Poesía, editado por Olifante en los "Papeles de Trasmoz", y que incluye tu fotografía de Ana Muñoz (como sabes, algo retocadilla: le quité las botellas de agua).
Que lo sepas.
Abrazos.
Crónica perfecta de un concierto extraordinario. Coincido en todo y ojalá no te equivoques en tus vaticinios, pues el grupo se lo merece, su propuesta es de una altísima calidad.
pues por fin, y dentro de lo que cabe, vuelvo a ser persona.
qué concierto tú...
estabas??
por cierto... y ahí se notan las horas a las que escribiste la entrada, que a saber qué estarías haciendo hasta esas horas, y con quién te juntarías...
no le sobra alguna letra al título?
o igual es que yo todavía veo doble...
un besazo, majo
Hola Manuel
Gracias por el aviso, en estos días cogeré el libro, desde que me pediste esa foto -con botellas de agua- me preguntó como será sin las botellas :-) y sobre todo, impresa en un libro!!!!!
Salu2 Córneos
Hola Retruécano.
Me alegro que te guste la crónica, tal vez sea por el estado en el que la escribí.
Salu2 Córneos.
Hola Paula.
No, no comprendo muy bien tu pregunta "estabas??". Claro que estaba, ¿Cómo podría escribir la reseña de un concierto si no he estado en él? Bueno, por poder, podría hacerlo pero no es el etilo de esta bitácora.
La letra a la que te refieres es una de las mejores cosas que he escrito en toda mi vida, entre otras cosas porque en este blog no sobra nada ni nadie.
Salu2 Córneos.
Ya tengo el libro al que Forega alude ;).
A mí me hace mucha ilusión leer tu nombre detrás de la foto. Además, me acuerdo de aquella tarde en la Expo, del encuentro posterior y de los tacones metidos en una bolsa de plástico y me sonrío.
Ay majo, cosas peores se han visto. Yo conozco gente que escribe sus crónicas antes de llegar a los actos a los que han sido convocados. Y no mueven una coma así se caiga el Pilar.
Yo no he llegado a escribir una reseña sin estar en el concierto...
pero vamos, alguna viendo dos o tres temas sí...
soy lo peor
jeje
yo también estuve en vetusta
nunca se sabe...
abrazos jefe
o.
Hola Ana.
El libro de Olifante!!!! en fin, lo encargué ayer en la librería de mi calle.
jajajaaj "Del encuentro posterior", eso es un título, Ana.
Y "los tacones metidos en una bolsa de plático" otro.
Fue un gran día, ya lo conté aqui, dejo el link para interesados:
http://lacurvaturadelacornea.blogspot.com/2008/08/ana-muoz.html
De ese encuentro guardo un especial recuerdo de los tres segundos previos a que cruzaramos nuestras palabras, las tuyas primero, of course, que menudo soy yo para primeros encuentros.
Fue un gran día.
Salu2 Córneos.
Hola Lamia
jajaja Certifico. He leído alguna reseña de algún concierto al que he acudido que, efectivamente, parece que el periodista estaba on the bed jajajajaja
Salu2 Córneos.
Hola O.
También es cierto, y que nadie nos oiga, que a veces, con tres temitas... pero seguro que fueron conciertos a los que ibas invitado, o por trabajo, no creo que esos a los que vas a disfrutar se resuelvan con una triada.
Ya verás como este concierto gana con el recuerdo, fue excelente.
Y si, ¡¡¡me gusta eso de "jefe"!!
jeje
Salu2 Córneos
PD. Permanezcan atentos porque he encontrado un "Punto de no retorno" que es una joya
hola Javier,
hacía un tiempo que no venía a visitarte y me alegra ver que fuiste uno más de los que disfrutamos con VM. Me sorprende las opiniones tan diversas que he escuchado sobre este concierto...pero yo comparto la tuya totalmente!!!El concierto en el Sonorama fue magnífico, pero la Oasis los arropó especialmente, y luego se pasaron por el Bacharach...
Sldos,
Marian
Hola Marian
Nosotros también fuimos al Bacharach pero como me ocurre siempre... demasiada gente, demasiado calor jejejeeje.
Un conciertazo, con el paso del tiempo aún me deleito más.
Salu2 Córneos.
Javier, ¿no tendrás la receta secreta de la transparencia?siempres estás en lugares dónde yo estoy...pero nunca te veo...será que no tengo la curvaturacórnea adecuada??desvélame tu secreto!
Marian
HOla Marian
jajajaj
Bueno en el Bacharach estuve, hmmm, cinco segundos, así que es difícil que nos vieramos.
En el concierto, en fin, sólo tenía ojos para el escenario jejejejej
Prometo estar más atento, resalada.
Salu2 Córneos.
Y por cierto: Las curvaturas de tus córneas son perfectas.
;-)
Publicar un comentario
<< Home