Tejiendo

 

Tejiendo un mundo nuevo

Había una vez un Teatro Indie & Gesto que decidió buscar palabras para una función abracadabra. Las palabras, que unas veces se encuentran del derecho y otras del revés, al grito de ¡¡¡basta!!! saltaron a una canasta. En la canasta unos retales se las daban de normales, pero las palabras sabiondas les cambiaron la onda. Entonces fue cuando llegaron Oswaldo del Indie enamorado y Tarumba el Gesto le alumbra. Los dos cogidos de una mano en la canasta husmearon y con la otra mano la cabeza se rascaron. Rascaron cremalleras enteras, bolsillos con chiquillos, agujas brujas y una máquina de coser que se hace de querer. La cosa estaba clarita si la querías entender: Las palabras los invitaban a tejer. Tejer emociones con canciones. Tejer humor del mejor. Tejer alegría, amor y aceptación con un mucho de entusiasmo y su poquito de confusión. Tejer en conclusión un trocito de vida, un recuerdo olvidado, el amor en compañía, todas esas cositas que queremos tú y yo.

El telón cierra la realidad y abre el escenario a un mundo nuevo. Ya sé que no hace falta que te lo digan, pero es que aparece un mundo nuevo, un mundo estrafalario que invita al vecindario a cambiar de imaginario. Ya sabes lo que te digo: Cambiar ese almacén oxidado que guardas en el coco como si fuera extraordinario. Si lo tiras a la papelera y dejas la mente en blanco, enseguida te das cuenta de que algo ha cambiado. Te lo dicen las luces, los colores otoñales y una música que embellece. Al fondo una pantalla proyecta imágenes con recortables de pantomima, y unas maquetas de cartón que manipula un actor como si fuera un maquinista. Todo está claro, no hay duda ni opción, estos chicos del teatro nos invitan a la imaginación. Se han inventado un cuento y ahora toca la presentación.

Por un lado sale Fermín con botas peripuesto, un paraguas que no le deja dormir y en la cabeza un sombrero que aunque parece un bombín, en realidad cubre la testa de un bombón. Lupe en el otro lado, trabajando de costurera su cara moldea para coser una copla que habla de volver. ¿Pero como me iba a imaginar que la malabarista de la mueca y el mohín, la de la aguja piruja, la de la lengua de trapo cuando hace falta un gazapo. Cómo me iba a imaginar que la costurera del vestido triangular, además de todos los accesorios, también sabe afinar?

Cuando Lupe y Fermín se juntan en el escenario yo ya los quería así. Caminan en línea recta hasta cuándo van de perfil, sus movimientos cuadriculados me recuerdan a las diagonales que, estiraditas y nada convencionales, dan sentido al contenido de lo que se dice allí. Que se habla mucho en esta función todo el mundo lo sabe, lo alucinante es que a ratos no se oye, y eso que las palabras tintinean, se repiten y se esconden. Fermín abre los ojos. Lupe con su cara asiente. Y los dos enamorados se entre tejen para siempre. Da igual que se peleen, que no se entiendan o que se ausenten, la dramaturgia hace la liturgia y remienda lo que acontece.

El nuevo mundo es un lugar más grande que el taller de un sastre y una costurera, por allí también se pasea un tipo que su figura altera y manipula la caricatura, a veces es un zagal pizpireta, otras veces tira del hilo y cuando menos te lo esperas, en una voltereta se convierte en el maquinista que con imágenes te da una pista.

Pero que no se asusten los fans de esta troupe, ni se pongan a patalear, tan solo hay que esperar a que al saltimbanqui le apetezca rapear, entonces todos los espectadores ya saben que ha llegado la hora de preguntar. Pregunta por un pueblo, pregunta por una emoción y cuando las preguntas se acaban empieza la improvisación.

Así se cierra el círculo que nos propone la función: Entre coser y toser, elige coser. Entre vivir y olvidar, elige vivir. Entre volver y recordar, ay, ay, ay. Entre volver y recordar, vuelve al teatro, a ese lugar donde Los Indigestos tejen historias que te ponen la cabeza del revés.

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Producción: Teatro Indigesto. Autores: Encarni Corrales y Oswaldo Felipe Royo. Dirección: Oswaldo Felipe Royo. Intérpretes: Encarni Corrales, Alberto Salvador y J.J. Sánchez. Escenografía: David Martínez e Iris Pérez. Vestuario: Raquel Poblador (Obsidiana Atelier) Diseño Iluminación: Ángel Cantizani. Maquetas: J.J. Sánchez.

7 de diciembre de 2022. Teatro de las Esquinas.