La curvatura de la córnea

13 diciembre 2008

Gatito

Eran la seis de la mañana después de ocho horas de trabajo. El cierzo se había levantado con furia, con más furia. La capucha del chándal era incapaz de darme calor así que caminaba rápido, todavía rodeado por el ruido de fondo de la fábrica, un ruido que en bruto, me asusta, ya me he acostumbrado a escucharlo tras la protección de los audífonos.
Era diminuto, el lomo negro y la panza blanca. Dio un salto desde no se dónde y se plantó delante de mis pies. Maullaba con furia y me dejo ver sus diminutos dientes. Me asusté. No fue por la fiereza impostada del gatito, gatito en tamaño, creo que fue su determinación. No le hice caso y seguí caminando, pero él insistía en ponerse delante de mi camino. Dio un par de saltos, siempre maullando, y volvió a obstaculizar mi marcha. Me molestaba su presencia desafiante, me pues nervioso y grité, pero no me hizo caso. Opté por acelerar el paso más y más para perderlo de vista, al fin y al cabo era un gatito diminuto. Terminé corriendo. El gato seguía sin aparentes problemas mis zancadas, siempre maullando. En el frenesí de la carrera entrelazó sus pasos con los míos, creo que con cierta calidad coreográfica.
Cuando llegué a la explanada donde había aparcado el coche, varios mecánicos que empezaban su jornada se dieron cuenta del baile que me llevaba con el minino. Se rieron. El felino se creció con las risas y se puso gallito junto a la puerta del conductor del utilitario que todos los días me lleva y me trae al trabajo. Había dejado de maullar y solo me enseñaba los dientes. No podía pensar. Fue el instinto quien me indicó la solución.
Comencé a dar vueltas alrededor del coche, el gato me siguió, poco a poco fuimos acelerando, el aumento de la velocidad fue exponencial hasta que en un momento determinado el gato me adelantó. Ese fue el momento clave: Cuando el gato pasó por la parte delantera del coche, accioné el cierre centralizado, abrí una de las puertas, me tiré de cabeza sobre la tapicería y cerré en un santiamén.
El gato descubrió tarde mi treta y volvió a maullar mas fuerte que nunca. Allí lo dejé con la luna llena a mis espaldas. Pero hoy tengo que volver al trabajo y me temo que el gatito de lomo negro y panza blanca me estará esperando, tal vez para vengarse.
Estoy acojonado.

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16 Comments:

At 13 diciembre, 2008 10:09, Anonymous Anónimo said...

Muy bien contado Javier, parece que lo este viendo, de eso se trata ¿no?. Como los mecanicos (me he reido).Gracias.

 
At 13 diciembre, 2008 11:46, Blogger Gubia said...

Cuidado con los gatos que ya se sabe que no son muy de fiar,jajjaa, es broma. En mi calle viven más de quince gatos que por la noche se van de juerga y montan unos saraos considerables. Si encuentras al gato negro ya sabes para donde lo puedes mandar, más que nada por el fiesteo y eso...Un abrazo y felices fiestas.

 
At 13 diciembre, 2008 11:53, Blogger Javier López Clemente said...

Hola Anónimo

Si lo ves es mérito tuyo, de tu imaginación y del gatito jajajajaja

Si te has reído yo soy feliz.

Salu2 Córneos.

 
At 13 diciembre, 2008 11:55, Blogger Javier López Clemente said...

Hola Gubia.

Lo que me extraña de este minino es que yo lo veo muy pequeño para andar sólo por la vida, tal vez sólo busque alimento o compañía, vete a saber!! pero lo que no sabe es mi pequeñ problemilla con los animales en general y los gatos en particular.

De todas formas esta noche, si lo encuentro, le digo que en Palencia hay fiesta a tutiplén. Atentos.

Salu2 Córneos,un abrazo y felices fiestas.

 
At 13 diciembre, 2008 12:26, Blogger Sara Fedrika said...

Es curioso como un ser insignificante nos puede hacer perder los papeles.

Lo has contado muy bien. Ya ves, sólo con un lindo gatito y tu salida del trabajo has conseguido un buen texto con el que al parecer nos hemos reído todos.

Quizás la presencia de la luna llena lo enfureció de ese modo.

Un abrazo.

 
At 13 diciembre, 2008 16:35, Anonymous Anónimo said...

¡Estás perdido majo!, los gaticos son más listos que el hambre y ese día tuviste la suerte del novato.
A mí siempre me han gustado los gatos (tuve una siamesa, Sapi, que era además de preciosa muy, pero que muy inteligente)pero hay gente que desconfía de ellos...
Yo me preguntaría en serio que le enfureció tanto.
De todas formas, si te sirve el consejo, lo mejor es ignorarlos.

 
At 13 diciembre, 2008 18:26, Anonymous Anónimo said...

Hola javier: creo que me estoy perdiendo algo que merece la pena y es conocerte personalmente; mil gracias por contestarme a pesar de ser un anonimo.Por favor sigue escribiendo lo haces genial,(y no soy pelotas).Gracias

 
At 13 diciembre, 2008 18:54, Blogger Lamia said...

Decía, en un comentario que se ha comido blogger, que he sonreído imaginando esa entrada de cabeza y corriendo en el coche, hecho un amasijo de piernas y brazos.
Y decia también, que yo tampoco me fiaría del gatito en cuestión. Es pelín diabólico.

 
At 14 diciembre, 2008 13:40, Blogger AGUSTIN MARTIN said...

mira el gatico, que te ha cogido cariño el minino, le has caido bien.. es que a ti se te coge cariño enseguida.

viste el calendario? para eso te llamaba..

saludos amigo

agustin.

stica

 
At 14 diciembre, 2008 22:03, Blogger George said...

Mira si en vez de decir el animal en cuestión que te estaba desafiando, desde el principio, habria pensado que era un pit-but de esos asesinos, pero si es que como te puede llegar a desafiar asin un minino g g g, me parto, se que hay parte de realidad y ficcion pero segoro que mas de realidad g g g, y cuidadin con los gatos que son muy traidores.

Chao Alicate

 
At 14 diciembre, 2008 23:24, Blogger Javier López Clemente said...

HOla Sara.

Chapeu!!
Interesante, muy interesante visión la tuya. Un insignificante, saber enfrentarnos a un insignificante, esa es la clave.
Tal vez el error sea ver insignificante a quien no lo es, a quien sabe jugar sus bazas.
Bien, acabas de brindarnos un buen tema de reflexión.

Y si además te has reído, pues brindo.

Salu2 Córneos y un abrazo.

 
At 14 diciembre, 2008 23:27, Blogger Javier López Clemente said...

Vaya hombre, LaMima, gracias por el ánimo.

Pues yo nunca fui amigo de los gatos, o quizás fueron, son, ellos los que no quieren ser mis amigos.

Por el momento me ha sido fácil ignorarlo, no lo he vuelto a ver, pero quien sabe dónde me espera agazapado.

Supongo que estaba enfurecido por el frío y por el hambre. Me han dicho que algunos currantes dan de comer a los gatos y este me vio con la mochila y pensó que le iba a dar de comer, otra cosa no se me ocurre.

Desde entonces siempre voy con un bocata de jamón, por si acaso

Salu2 Córneos.

 
At 14 diciembre, 2008 23:33, Blogger Javier López Clemente said...

Hola Anónimo (de nuevo)

Me pondré serio. Me gusta mucho que el personal lea lo que en esta casa cuento, pero si además pierden parte de su tiempo en comentarlo, eso me parece un lujo. Por eso siempre constesto a todos y cada uno de los comentarios, así que no veas en eso algo meritorio, el mérito es vuestro, de los comentadores, no mío.

Por otro lado creo que el mejor Javier es el que se asoma a esta ventana, personalmente seguro que empeoró jejejeej y va en serio.

De todas formas si estas interesado, pues lo podemos arreglar, Zaragoza no es muy grande y un paseo hasta cualquier café es poco esfuerzo.
En esta bitácora tengo un correo con el que te puedes poner en contacto conmigo de manera privada, es el sonolopez@yahoo.es

Y bueno, con comentarios como el tuyo siempre es más fácil juntar unas palabras con otras.

Salu2 Córneos y gracias las que tu tienes.

 
At 14 diciembre, 2008 23:34, Blogger Javier López Clemente said...

Hola Lamia

¡¡Así me gusta!! Por fin alguien que se pone un pelín de mi lado y mi sufrimiento, y es verdad ahora que lo dices: Era un poco diabólico.
jajaja

Salu2 Córneos.

 
At 14 diciembre, 2008 23:35, Blogger Javier López Clemente said...

Hola Agustín.

ay, que me pongo chocho jajaajaj

El calendario es brutal, pero brutal brutal
:-) va a ser la bomba

Salu2 Córneos.

 
At 14 diciembre, 2008 23:37, Blogger Javier López Clemente said...

HOla George.

¿Pero como me va a confundir con uno de esos perros con la cara de pan y buena persona que yo tengo?
jajajajaja

Y ya tengo cuidadín, hoy he cambiado el caminito de salida para evitar coincidir con el minino.

Salu2 Córneos.

 

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